Poniendo hoy orden entre la multitud de papeles que se amontonan después de un curso, una temporada, un año, ... he encontrado algo que, aunque sabía que lo tenía, hacía tiempo que tenía perdido. Es una fotocopia de un escrito que realizó hace algunos años (1991) José Martínez Alonso "Pepe" y que cada vez que lo he leído me ha dado un vuelco el corazón. Los que tuvimos la suerte de conocer a Pepe de "cerca" comprederán toda la fuerza que transmiten estas palabras.
"Hace ya tiempo que prometí a un joven, gran entusiasta del deporte, que escribiría algo sobre el correr. Lo prometido es deuda y éstas tienen que ser saldadas.Hace ya casi ocho años que empezé a correr. He podido darme (cuenta) de dos facetas, entre otras que más adelante relataré, que este deporte tiene:Por un lado, el sacrificio, la lucha, el esfuerzo que muchas veces quiere ir más allá de los límites que Dios ha dado a nuestro cuerpo. La otra cara del correr es:La alegría, el gozo que invade, nuestro ser cuando hemos finalizado el circuito, el ánimo exaltado después de haber llegado a la meta.Si estos dos anteriormente referidos aspectos de esta disciplina deportiva son importantes para fortalecernos, hay otros factores que podemos considerar.Uno de los grandes problemas de ja humanidad es la pérdida de salud y el progreso de las enfermedades.Mediante el correr, fortalecemos nuestra salud corporal y prevenimos las dolencias de todo tipo.El riego sanguineo es más eficaz, pues nuestro corazón se fortalece y puede impulsar más sangre y con mayor energía. La desasimilación o eliminación de sustancias tóxicas, que se producen diariamente en el organismo es el proceso de transformación de los alimentos, se acentúa por el sudor corporal durante la carrera y después de ésta.Hya una mayor oxigenación de la sangre al aumentar el ritmo respiratorio. Estas son otras consecuencias beneficiosas que podemos aportar a nuestra salud mediante el correr.Analicemos la repercusión que esta especialidad atlética tiene en el mundo del trabajo.El corredor rendirá más en su trabajo y vencerá mejor las dificultades, cuando éste es más duro y exije un mayor esfuerzo.Uno de los mayores triunfos del correr es, el poder haber conocido a muchos corredores.Al mismo tiempo que competiciones, o nos entrenábamos en carreras populares, en gran manera favorecidas por los organismos del Estado, nuestra amistad crecía y nos alegraba.Sentir el fresco de la mañana al correr por la calles de la Isla. La Isal de mis raíces y de mi corazón, alegró y fortaleció mi vida.Por último quiero decir al lector de este humilde escrito, que no practique el correr, lo siguiente:Si se anima a correr, sea prudente.Primero ande. Después marche y más adelante corra. Enriquecerá su vida con algo tan fácil de practicar."
27-11-91
Pepe
No nos olvidamos de tí. Seguro que sigues corriendo donde quiera que estés.
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